A menudo eclipsado por su vecina Croacia, Montenegro es, injustamente, uno de los países más olvidados del viejo continente. Y es que hay muchísimos lugares dignos de ver en Montenegro: desde la preciosa bahía de Kotor hasta el increíble Parque Nacional de Durmitor. Un destino cargado de cultura, historia, paisajes fascinantes y naturaleza abundante.
El mejor período para descubrir Montenegro es el que va de mayo a septiembre. Sin embargo, en julio y en agosto deparan a los visitantes mucho calor y playas llenas de multitudes, por lo que recomendamos visitar el interior antes que la costa durante estos dos meses.
El resto del año es bueno para visitar depende de la zona y las actividades que quieras hacer. ¡Nuestros Travel Agents especialistas te asesorarán para que tu experiencia sea la mejor posible!
En las cordilleras más altas, el clima se vuelve alpino, con nieve frecuente y persistente durante todo el invierno.
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